En la noche de hoy el equipo argentino de fútbol Boca Juniors igualó en el partido de vuelta de la final que disputó contra Arsenal de Sarandí, jugado en el Estadio de la Bombonera y así se consagró por cuarta vez campeón de la Recopa Sudamericana logrando así su décimo octavo título igualando la marca que registraba el equipo europeo AC Milan de Italia.
En el partido de ida los boquenses habían ganado por 3-1 dejando casi sellada la final, pero el cuadro de Sarandi no dio su brazo a torcer y con nueve jugadores, por largos minutos, le hizo la pelea y casi pudo llevar el partido a los penales.
El delantero de Boca Rodrigo Palacios puso adelante a su escuadra recién a los 7 minutos de haberse iniciado el juego pero en la segunda etapa el rival le dio vuelta al score, los goles fueron a los 58 y 69 minutos de la segunda etapa por partes de Carrera y Matos respectivamente.
Las Recopas que logró ganar el cuadro azul y oro fueron en los años 1990, 2005, 2006 y 2008 dejando relegado a su seguidor mas cercano en Sudamérica Independiente de Avellaneda.
Fríamente se puede decir que actualmente los de Boca son el cuadro más fuerte y representativo de nuestro Continente y que no se avizora un contrincante a su nivel.
En el partido de ida los boquenses habían ganado por 3-1 dejando casi sellada la final, pero el cuadro de Sarandi no dio su brazo a torcer y con nueve jugadores, por largos minutos, le hizo la pelea y casi pudo llevar el partido a los penales.
El delantero de Boca Rodrigo Palacios puso adelante a su escuadra recién a los 7 minutos de haberse iniciado el juego pero en la segunda etapa el rival le dio vuelta al score, los goles fueron a los 58 y 69 minutos de la segunda etapa por partes de Carrera y Matos respectivamente.
Las Recopas que logró ganar el cuadro azul y oro fueron en los años 1990, 2005, 2006 y 2008 dejando relegado a su seguidor mas cercano en Sudamérica Independiente de Avellaneda.
Fríamente se puede decir que actualmente los de Boca son el cuadro más fuerte y representativo de nuestro Continente y que no se avizora un contrincante a su nivel.